24 de abril de 2013

Un día especial

El post de hoy es cortito, pero es cortito por una muy buena razón. Ayer llegamos de nuestro fin de semana largo, bastante largo o casi le podríamos llamar mini vacaciones. Estos días me he dedicado a descansar, a disfrutar del buen tiempo y sobretodo a disfrutar de Júlia y Marçal.

Ha hecho esos días en los que asoma el sol pero hay que ir abrigado. Esa sensación de primavera, de haber dejado el invierno atrás pero lejos aún del verano. Y como no, hay que vestirse tipo cebolla, es decir, con mil capas para poner y quitar. Con Marçal es más fácil, pues él se viste y desviste solo, es muy mayor! Con Júlia, al ser pequeñita es más complicado. Creo, consecuencia de esto, Júlia ha llegado de nuestras mini vacaciones enferma, muy resfriada, incluso con algo de fiebre, veremos como evoluciona.

Estos días hemos paseado, jugado, leído, hemos ido en bici, incluso hemos disfrutado del placer de comprar fruta y verdura muy muy fresca. Porque el placer no empieza en el paladar, empieza con la mezcla de olores que se desprenden al pasear por calles antiguas y estrechas repletas de paradas llenas de productos directos del huerto. Una explosión de colores y olores no fácil de encontrar.

Ayer San Jordi, intercambiamos libros y rosas entre nosotros.
Marçal fue el más beneficiado y tubo unos cuantos libros; libros perfectos para empezar a leer, uno de ellos dedicado a su más querida letra Ç.


Júlia ha disfrutado de su libro musical con un botón mágico.


Edu y yo, por supuesto, también tuvimos nuestros regalos "handmade" de Marçal; una preciosa rosa para mi y un libro muy especial con ilustraciones propias.



San Jordi significa muchas cosas para nosotros, además de las rosas, los libros y el santo de mi hermano, hay algo más. Es un día especial en el que el amor es parte importante. Así que nosotros lo hemos celebrado en familia y con mucho amor.

Besitos!!


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